Leeby Koko rascador con cama y juguete para gatitos

Rascador barco de actividades para gatitos Descubre el Leeby Koko, un completo rascador con cama para gatitos diseñado pensando en el bienestar de los más jóvenes del hogar. Parte de la encantadora colección Kitten de Leeby, este modelo está creado para ofrecer un espacio ...Rascador barco de actividades para gatitos Descubre el Leeby Koko, un completo rascador con cama para gatitos diseñado pensando en el bienestar de los más jóvenes del hogar. Parte de la encantadora colección Kitten de Leeby, este modelo está creado para ofrecer un espacio multifuncional ideal para gatitos y gatos adultos de tamaño pequeño.

Con una estructura robusta, detalles lúdicos y una estética adorable, es mucho más que un rascador: es un pequeño parque para gatos donde pueden descansar, jugar y afilar sus uñas con total seguridad. Su diseño vertical incorpora un poste cubierto de sisal blanco natural, perfecto como rascador vertical para gatos y afilador de uñas para gatos. Además, incluye una base acolchada como zona de descanso y una divertida bola rascador gato que mantiene a tu mascota estimulada.

Todo ello está montado sobre tablero de partículas resistente y decorado con un encantador tejido azul que simula un pequeño barco con vela. ¡Ideal para el desarrollo físico y emocional de los felinos en crecimiento! El rascador para gato Leeby Koko también se convierte en una práctica solución para prevenir arañazos en muebles. Como rascador pequeño gato, ocupa poco espacio y es fácil de mover entre estancias.

Gracias a sus materiales de alta calidad y su diseño funcional, se convierte en la mejor opción para quienes buscan un rascador con cama para gatos que combine juego, descanso y durabilidad. Y, por si fuera poco, incluye un juguete para estimular el interés desde el primer momento. Conoce más sobre la colección Kitten Leeby acompaña a tu gatito desde sus primeros pasos, ofreciéndole un entorno seguro para explorar y aprender.

La gama Kitten está hecha con materiales suaves y ligeros, adaptados a su tamaño y energía. Son el lugar perfecto para sus primeras sesiones de rascado, fortaleciendo sus patas y despertando su curiosidad desde el principio.